Las fotografías nos permiten revivir esos momentos que quisiéramos llevar siempre en nuestro corazón, cuando las vemos inspiran, motivan y evocan esas emociones que en algún momento sentimos. Esa es la principal razón por la cual, una foto que nos produce todo esto debe imprimirse y no sólo conservarse en formato digital.

Será el mejor regalo que puedes hacer para ti y tu familia, las fotos impresas son como tener un baúl de tesoros, el cual tus hijos podrán disfrutar a lo largo de su vida.

Imagina lo felices que estarán de poder ver las fotos de cuando sus papás se casaron, todos los niños sienten mucha curiosidad por saber cómo fue ese día, seguramente en una impresión lo apreciarán más real que si sólo conservas las fotografías digitales, sin mencionar que los niños pequeños son kinestésicos por naturaleza y para ellos es importante no sólo ver, sino también tocar, sentir. Igualmente podrán observar cuando eran más pequeños, algún cumpleaños o simplemente, una reunión familiar emotiva.

 ¿Qué tal esas fotos donde aparecen dormidos, con los abuelos o haciendo un lindo gesto? Es cuestión de sentarse una tarde en la sala o acurrucarse en la cama, para revivir esos bellos momentos.

Más allá del valor emocional de una fotografía impresa, algunos expertos coinciden en que verlas en familia, ayuda al sentido de pertenencia de los pequeños, fortalece su autoestima y tiene un efecto directo en la construcción de lazos familiares.

Algunos consejos al momento de imprimir tus fotografías:

o   Puedes encargar más de una copia de la misma fotografía con el fin de hacer un regalo especial. Por ejemplo a tus papás y a tus suegros, ellos estarán fascinados con el detalle y lo agradecerán, estoy seguro de que lo disfrutarán más que nadie. Además tener varias copias hará que te relajes si una foto se maltrata, se ensucia o se rompe.

o   Checa el abanico de opciones en los acabados del papel, los hay mates, con brillo, incluso algunos laboratorios dan la opción de imprimir las fotos texturizados y hasta con calidad de museo. 

o   Escoge las fotos que más te gusten, toma tu tiempo, no hay prisa. Tu intuición te guiará para elegir las mejores.

o   Regalar fotografías es algo muy personal, en lo posible debes tratar de entregarlo en mano. En cuanto sea posible, reúnanse para verlas juntos y compartir el momento.

Toma en cuenta, que otra de las ventajas de la experiencia de ver fotografías de manera física es que se vuelve permanente, dejamos atrás lo efímero del mundo digital, lo cual promueve valores familiares y resta importancia a la cultura de la inmediatez. Deja el mensaje correcto de que la familia es constante, pueden pasar los años, pueden cambiar las cosas y siempre estará unida.

Ya tienes el regalo perfecto para ti y tu familia. No dejes pasar más días, aprovecha que estamos en casa para encargar tus impresiones e incentivar un maravilloso tiempo en familia.

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